Cepeda y Vladimir García quedaron fuera del equipo!
Con polémicas inclusiones y exclusiones, el equipo que representará a Cuba en el torneo Premier 12 organizado por la IBAF/WBSC fue dado a conocer ayer, que será dirigido por Víctor Mesa y estará encabezado por peloteros como Yulieski Gourriel, Alfredo Despaigne y Héctor Mendoza, sorprendiendo a todos la ausencia del que ha sido el mejor bateador cubano en eventos internacionales que ha visto esta generación: Frederich Cepeda. El róster está conformado por 28 peloteros más cinco que quedarán en la reserva en caso de una eventualidad. Otros equipos han dado también sus nóminas en los últimos días, demostrando que la empresa en esta ocasión será más difícil aún que cualquier otro reto que haya tenido la selección nacional cubana.
Tal vez el punto flaco del conjunto (o el más notablemente flaco) después de las incógnitas que levanta el pitcheo, sea la defensa de la receptoría, pues Osvaldo Vázquez y Yosvani Alarcón son enmascarados meramente ofensivos, mientras que Frank Camilo Morejón dio muestras de algunas fallas de concentración en el Clásico Mundial de Béisbol de 2013, hace dos años.
Frederich Cepeda no estará en el conjunto. Pese a su pobre desempeño en Japón este año, pegó un importante jonrón en el partido de semifinal de los Juegos Panamericanos de Toronto (evento al que, si me preguntan, ninguno de los peloteros contratados en ligas foráneas debió haber asistido), y con el descanso apropiado podría haber sido bien útil al conjunto, aunque tal vez uno de los pilares del conjunto sea precisamente su outfield (aunque aqueja inexperiencia internacional).
Precisamente este apartado está liderado por Alfredo Despaigne, quien aún se encuentra en plena actividad con los Chiba Lotte Marines de la Nippon Professional Baseball, luchando por vencer a los Fukuoka SoftBank Hawks en la fase final de la Serie Clímax de la Liga del Pacífico (habrá que ver si el agotamiento no le pasa factura, pues lleva un tren de actividad muy parecido al de Cepeda). Julio Pablo Martínez emerge precisamente como el candidato a centerfield regular y hombre proa de la armada, y sí ha sorprendido la exclusión del avileño José Adolis García, quien a pesar de sufrir de una enorme falta de disciplina en el plato, tiene todas las herramientas necesarias para producir en la armada cubana, siempre y cuando no sea utilizado en el leadoff spot[i]. Stayler Hernández se ha ganado la selección a estacazo limpio, y llama la atención que se ubique en los jardines a Lourdes Y. Gourriel, quien normalmente funge como jugador de cuadro. La adición de su hermano mayor Yunieski, líder de los bateadores de la CanAm League (quien ahora cumplirá el sueño que expresó de jugar en un equipo grande con sus dos hermanos, por eso no hablaremos del descanso), hace que sea esta la primera vez que los tres miembros del clan Gourriel estén defendiendo los colores de la escuadra principal cubana.
En el cuadro sobresale la intencionalidad de utilizar dos primeras bases, uno zurdo y otro diestro, en las figuras de Alexander Malleta y Yasiel Santoya, aunque me habría gustado más ver incluido en este conjunto al granmense Guillermo Avilés. Por desgracia, apenas se le permite defender la inicial en el equipo de los Alazanes, y posiblemente sea esta una de las causas por las que no batea mucho más. Nuevamente se ausenta el segunda base natural, un mal del que padeció Cuba luego de la salida de Antonio Pacheco, y que pareció tener chance de resolverse cuando llegó el yumurino José Miguel Fernández, pero el encanto duró poco cuando este último abandonó el país. Por fortuna, varios jugadores en el conjunto tienen la capacidad de hacerlo, aunque ninguno sea “nativo” de la posición: excepto Malleta y Santoya, todos los demás.
Vuelven a aparecer Yordán Manduley y Yorbis Borroto como los posibles candidatos a defender el campo corto. Pese a que lo hizo bien en las últimas semanas en Canadá, y que ha tenido un comienzo bastante estable con el bate y el guante, se podría haber prescindido de Manduley (realmente, fue innecesario llevarlo a los Panamericanos, y si no hay intenciones de que juegue de regular, deberían dejarle descansar) en favor del granmense Adrián Moreno, quien se encuentra involucrado en una excelente campaña ofensiva, aunque tal vez le falte crecer un poco a la defensa, pues al igual que la gran mayoría de sus coequiperos en la Serie Nacional, les falta estabilidad con el guante. O sea, que todos sabemos precisamente que el avileño (acreditado por su bateo en Toronto y por la buena campaña que va teniendo) será el que juegue de regular en las paradas cortas, aunque no olvidemos que el mentor será VM32, así que excepto Santoya, Malleta, los receptores, o todo jardinero que no se llame Lourdes Jr., cualquiera puede salir en algún momento de desesperación a defender la posición.
El tercera base regular será Yulieski (la temporada que está teniendo indica que está tal vez en la mejor forma de cara a un torneo internacional que ha exhibido desde el Clásico Mundial de Béisbol de 2006), aunque nuevamente puede esperarse cualquier cosa, incluyendo su presencia en la intermedia y la de Yurisbel Gracial en la esquina caliente.
Algunas (yo diría que demasiadas) interrogantes aparecen en el área del pitcheo. En primer lugar, quisiera equivocarme, pero todos sabemos lo que puede pasar cuando Jonder Martínez entre a relevar en un momento crítico contra un bateador poderoso, igualmente, Norberto González, pese a su probada calidad en el pasado, se ha mantenido totalmente fuera del radar de los directivos cubanos, al igual que Héctor Mendoza, quien terminó con dolencias en los Juegos Panamericanos, otro que no debió haber asistido a un torneo que revestía poca importancia para el béisbol cubano (aunque no así para la desesperada dirección del INDER, que vio escaparse no solo el segundo, sino el tercer lugar por países en la cita continental), en el que las posibilidades de medalla no eran seguras.
El as indiscutible del equipo, sin importar la forma en la que se encuentre nadie, deberá ser el pinareño Yosvani Torres, quien demostró tener todas las características de un junkballer, además de sacar outs con pocos lanzamientos. Freddy Asiel Álvarez y Yoanni Yera serían los otros abridores seguros (aunque aún esperamos del villaclareño esa actuación brillante que lo consagre en algún evento internacional), mientras que el cuarto iniciador se lo disputarían entre Danny Betancourt, Frank Montieth, Alberto Bicet y Yoalkis Cruz. Los demás deberían tener el rol de relevistas. La ausencia de Vladimir García o el hecho de que se haya desestimado a algunos otros lanzadores con buenos desempeños en estos momentos pintan como las pinceladas menos coloridas del staff.
En general, se ve un equipo con características similares (y algunos puntos más débiles, otros más fuertes) en comparación con el que fue a Toronto, con algunos cambios evidentes, y en el que algunos rostros que se ausentaron de la escuadra nacional vuelven a aparecer (algo que se ha hecho una y otra vez en cada torneo más o menos fuerte al que Cuba ha asistido durante los últimos años).
Aunque le veo a este conjunto posibilidades justas, es decir, que no van a pasear la distancia (ya me olvidé de lo que es eso), para clasificar a la segunda ronda, un enfrentamiento con cualquiera de los rivales de la otra llave pondría a los criollos contra la pared, por lo que intentar clasificar de primeros o segundos, para medirse entonces a cuarto o tercero del otro apartado, debería ser el objetivo primordial, toda vez si eso significa evitar el enfrentamiento con Japón (según su nómina amplio favorito), Estados Unidos o Corea del Sur, que pintan precisamente para ser los que se disputen la cima de su grupo.
Ya que no puedo “escoger” el equipo, me gustaría ver una alineación en la que aparecieran Julio Pablo (cf), Rudy (2b), Stayler (lf, Yulieski como tercero en los últimos tiempos me trae malos recuerdos), ADR54 (bd), Yulieski (3b, es el más apto para proteger al mayor slugger que tiene el país), Vázquez o Alarcón (c), Lourdes Jr. (rf), Malleta (1b), y Borroto o Manduley (ss) cerrando la tanda. Claro, que tratándose de Víctor Mesa al timón de esta nave, cualquier cosa (buena o mala, pero que no nos ciegue el optimismo) puede pasar.
Repasando otras nóminas que han ido emergiendo en los últimos días, podríamos decir (nuevamente, y hasta que el terreno no pruebe lo contrario, que Japón es el conjunto más fuerte, presentando en su roster a figuras de la talla de Shohei Otani, sin dudas la joven sensación del pitcheo de nipón en las últimas temporadas, que ya mostró credenciales en el match contra una selección de estrellas de las Grandes Ligas, llegando a las 100 millas por hora en su recta. Otro que aparece malintencionado (y deseoso de vengar el agravio de la semifinal del Clásico Mundial de Béisbol ante Puerto Rico) es el derecho de los Hiroshima Carp Kenta Maeda, e igualmente se destacan en este roster abridor de los Yomiuri Giants Tomoyuki Sugano. Entre ellos, Yudai Ono y Yuki Nishi deben estar los abridores. A la ofensiva sin dudas destacan Yuki Yanagita (.363 AVG, 110 C, 34 HR, 99 CI, 32 BR), Tetsuto Yamada (.329 AVG, 119 C, 38 HR, 100 CI, 34 BR), Shingo Kawabata (.336 AVG, 195 H), Takeya Nakamura (37 HR, 124 CI) o Shogo Akiyama (216 H, Nuevo Récord para la NPB). Igualmente, el mentor Hiroki Kokubo decidió ingresar sangre joven en el plantel y prescindió de veteranos como Shinnosuke Abe o Ichiro Suzuki (a quien tuvo en su radar) y la integralidad de los jardineros seleccionados dejó fuera del roster nada menos que a Yoshio Itoi.
Por su parte, los coreanos presentan nuevamente un roster listo para hacer fuerza a cualquier rival (por lo que el Grupo B del torneo será todo una masacre. Entre los nombres más notables aparecen el del lanzador Chang-yong Lim, quien soportara el indiscutible decisivo del segundo Clásico Mundial de Béisbol a manos de Ichiro (en un momento en que lanzaba con los Tokyo Yakult Swallows), y quien se ganara la admiración de todos por haber asumido la responsabilidad de manera honorable. Otro nombre que llama la atención es el de Dae-eun Rhee, lanzador que también ha probado su valía en el circuito asiático. Ming-ho Kang, veterano de Clásicos aparece en la receptoría, y la ofensiva se redondea con hombres de la talla del fornido internacional Dae-ho Lee, el poderoso Byung-ho Park, el completo jardinero Ah-seop Son y el veterano Yong-kyu Lee. La lesión de Jung-ho Kang no es la causa principal de su ausencia, pues la MLB no tiene intenciones de autorizar a nadie a participar en el certamen.
Pero el cuadro que más debería preocupar a Cuba, sobre todo porque está en la misma llave y por el enfermizo antecedente de hacer daño a los antillanos en los últimos tiempos, es precisamente la banda de los Tulipanes de Holanda. Pese a que en esta ocasión no contarán con Rick van den Hurk (quien decidió saltarse el Premier 12), la banda Oranje sí mostrará un pitcheo de experiencia, con rostros más que conocidos (dígase Rob Cordemans, Orlando Yntema, Diegomar Markwell, Tom Stiufbergen, Shairon Martis), más la adición de nombres como el del una vez prometedor Juan Carlos Sulbarán o el ex ligamayorista Jair Jurrjens. Aunque dieron una nómina de 35 peloteros (o sea, que siete saldrán de baja), podemos imaginarnos que entre los regulares estarán Yurendell de Caster, Sharlon Schoop (no confundirlo con Jonathan Schoop), Kalian Sams, más los ex ligamayoristas Roger Bernadina y (doblen las campanas) Andruw Jones, autor de más de 400 vuelacercas en las Grandes Ligas, ganador de varios Guantes de Oro, y el hombre que anotó la carrera que dejó al campo a Cuba en el partido de eliminación en el Clásico Mundial de Béisbol de 2013.
De modo que la situación no parece nada fácil para Cuba, quien tendrá como ventaja en el grupo en que se encuentran que los mismos rivales a los que enfrentará se tendrán que medir también entre ellos. Sin dudas los más complejos serán los Tulipanes y los de la Hoja de Arce, actuales campeones panamericanos, a los que tampoco se les pudo ganar en Toronto. Taiwán es un conjunto complejo para cualquiera, pero de los asiáticos es el más asequible para los cubanos. El equipo puede clasificar, incluso como segundo y hasta de primero, pero para esto último deberá evitar perder con dos de sus tres más fuertes rivales y procurar a toda costa que ninguno de los otros dos le complique el panorama. Pese a que es un torneo de menor categoría que el Clásico, este pinta con un formato de clasificación que será muy complicado para los criollos.
Equipo Cuba-
Catchers (3): Osvaldo Vázquez, Yosvani Alarcón y Frank Camilo Morejón. Infield (7): Yasiel Santoy, Alexander Malleta, Yorbis Borroto, Yordán Manduley, Yurisbel Gracial, Yulieski Gourriel y Rudy Reyes. Outfield (5): Julio Pablo Martínez, Stayler Hernández, Lourdes Y. Gourriel y Yunieski Gourriel. Pitchers (13): Yosvani Torres, Yoanni Yera, Freddy Asiel Álvarez, Frank Montieth, Danny Betancourt, Alberto Bicet, Yoalkis Cruz, Jonder Martínez, Norberto González, Liván Moinelo, Yunier Cano, José Ángel Garcia, Héctor Manuel Mendoza. Refuerzos (5): Yulexis La Rosa (C), Guillermo Avilés (1B/OF), Yunior Paumier (IF), Miguel Lahera (P) y Yadier Hechavarría (P). Dirección: Víctor Mesa (manager), Alexander Ramos (coach), Lázaro López (coach), Rogelio García (coach de pitcheo), Raciel Sánchez (coach de pitcheo), Víctor Figueroa (preparador físico).
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