Tomado del blog de Emilio Ichikawa
Cuban Americans for Engagement, (CAFE) reconoce que la liberación de Alan Gross, subcontratista norteamericano de la USAID que cumple condena de 15 años de prisión en Cuba y la de los tres prisioneros cubanos, restantes del grupo de los Cinco, sería un paso significativo para el mejoramiento de relaciones entre Cuba y EE.UU.
Cuatro miembros de la Junta Directiva de CAFE (Arturo López-Levy; Raúl Morejón; Ernesto Cabo y Jhon Cores), se reunieron el pasado 22 de junio con el Sr. Scott Gilbert, abogado del Sr. Alan Gross, con el interés de conocer más de cerca la actual situación del caso Gross.
El Sr. Gilbert recibió amablemente en sus oficinas de Washington a los miembros de CAFE. Esta es la primera vez que Gilbert se reúne con una representación de CAFE, si bien expresó su agradecimiento a Arturo López-Levy por su compromiso con el tema. Durante el encuentro, el Sr. Gilbert destacó su preocupación por el deterioro físico y mental de Gross y la necesidad de aprovechar la oportunidad existente para resolver el caso, mejorando así las relaciones entre Cuba y los Estados Unidos. Los miembros de CAFE tomaron nota de esto, afirmando su acuerdo en la urgencia de que ambos gobiernos tomen medidas adecuadas y oportunas para resolver la situación del subcontratista.
Los miembros de CAFE recalcaron que de haberse tomado a tiempo medidas políticas oportunas en Cuba y EE.UU podría haberse evitado la tragedia de que Alan Gross y Gerardo Hernández estuvieron ausentes al momento del fallecimiento de sus respectivas madres.
CAFE coincide con el Sr Gilbert en que hay una creciente toma de conciencia en la opinión pública estadounidense acerca de la urgencia de encontrar cuanto antes una solución para el problema de su defendido. CAFE ha constatado que cada vez más estadounidenses y cubanoamericanos están conscientes de que la detención de Gross es responsabilidad del gobierno estadounidense por su uso encubierto de mecanismos de asistencia internacional al desarrollo para fines de cambio de régimen, ajenos a los reconocidos como legítimos por la ley internacional. Asimismo, coincidimos en que existe una creciente demanda entre ciudadanos cubanos y estadounidenses, y líderes políticos por acción y liderazgo presidencial en este tema.
CAFE manifestó su reconocimiento de que ambos juicios, tanto el que condenó a los Cinco cubanos en Miami como el de Alan Gross en Cuba, fueron considerados por el Grupo de las Naciones Unidas sobre la detención arbitraria como carentes de los requerimientos mínimos de justicia e imparcialidad.
CAFE apoya de manera inequívoca el llamado del Sr. Gilbert a la Administración Obama a buscar una solución inmediata a este problema. Instamos a los presidentes Barak Obama y Raúl Castro a escuchar las voces notables que, como el Senador Patrick Leahy, apoyan una solución razonable, con precedentes, a través de gestos humanitarios por parte de ambos gobiernos.
Como cubanoamericanos apoyamos gestos de buena voluntad que conduzcan a la liberación de Alan Gross y de los tres cubanos. Como cubanos y norteamericanos creemos que una acción de este tipo tendría un enorme impacto positivo para Cuba, los Estados Unidos y el resto de América Latina.
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