Nos atacan por un flanco que ni existe, el colmo del delirio.

Uno de los últimos y más cobardes ataques contra la revolución cubana es acusarla de practicar y haber practicado el racismo desde el 1959 año en que triunfó derrocando al dictador Fulgencio Batista. Es una moda, es de lo que más se lee, la mentira más divulgada por  blogueros y medios contrarios al gobierno de Cuba por estos tiempos. Yo me he negado a descalificar con adjetivos e improperios a los disidentes cubanos, me parece que dueños de la verdad podemos contradecirlos con hechos contundentes, conceptos demostrables, en fin, con la verdad, así de simple debe ser la fórmula revolucionaria, La Verdad.

Vamos a ver porque yo digo que mienten vilmente aquellos que dicen que el gobierno de Cuba practica y promueve el racismo.  Voy a defender mi tesis de la manera más breve y sincera posible.

Cuando el gobierno se dio a la tarea de alfabetizar lo hizo para todos los ciudadanos analfabetos del país y no solo para los analfabetos blancos, cuando el gobierno decidió construir escuelas, hospitales, universidades, nuevos centros de investigación, promovió carreras en los países socialistas europeos, escuelas de artes, de deportes, escuelas militares como los Camilitos, o la ínter arma Antonio Maceo, para todos, no solo para blancos, a ver, quién puede negar lo que digo. Las únicas minorías que presentaron algún tipo de trabas en algunos centros estudiantiles o para algunas carreras eran los religiosos, incluso algunos homos sexuales, y en estos grupos casualmente la mayoría eran blancos, nadie se metió con las religiones afrocubanas. La revolución fue construida por el pueblo y para todo el pueblo, todos tenían igual oportunidades, derechos y deberes, yo sé que a los enemigos no les gusta hablar de este tema con este enfoque, van a decir que más de lo mismo.

 

Ok! Entonces vamos a verlo con otro enfoque, se que este les gustara más, pero concluiremos lo mismo, ustedes mienten. Cuando se implantó la libreta de abastecimiento con los alimentos racionados, se implanto para todos los cubanos, blancos y negros, cuando las guaguas iban repletas, desbordadas y atrasadas, era para todos, cuando teníamos derecho a un juguete básico, no básico y dirigido, el número se rifaba y te podía tocar el ultimo día y coger apenas algún juguetico barato y tonto, eso nos pasaba a todos, cuando se implanto el UMAP, fue para todos, para todos fue el servicio militar, la secundaria en el campo, el domingo rojo, el derecho a comprar artículos de primera necesidad que había que ganarlos por la CTC, con los méritos y deméritos éramos medidos con la misma vara todos, los blancos y los negros, cuando no podíamos entrar en los hoteles ni usar ciertas áreas de algunas playas, éramos todos y no solo los negros, para ser miembros de la UJC, del PCC, y de cualquier otra organización política, se exigían por igual los mismos méritos, todos recibimos la misma educación, fuimos a las mismas escuelas, vimos las mismas telenovelas, aplaudimos los mismos discursos y lloramos los mismos mártires, veneramos los mismos héroes y compartimos los mismas deidades, cantamos las mismas canciones y recitamos las mismas poesías. Que pena con nuestros mártires de Angola, negros y blancos que murieron luchando contra el régimen racista del Apartheid, por ultimo, vamos a preguntarle a los cientos de miles de africanos que estudiaron a lo largo y ancho de la isla, muchos de ellos llegaron adolescentes que jamás habían visitado un colegio.

Vamos a dejarlo por aquí, porque desperdician energías en cobardes acusaciones, esas energías podrían usarlas en la búsqueda de la verdad, si la encuentran, entonces tendremos que respetarles y escucharles, si ustedes dicen que en las cárceles del país la mayoría de los reclusos son negros, yo no lo sé no tengo el dato, veo que hay también muchos policías negros, fiscales negros, abogados negros. En fin… Ustedes no se merecen ni este humilde comentario.